Cristian R. Gordo Trujillo (Mallki)
Director Corporación Art-Quimia
En mi caso, las uso para medir el nivel de agua de la quebrada Lagunilla, de donde provengo. De niño, el agua pasaba sobre una piedra y la cubría. Ahora esa piedra se deja ver al rayo del sol. Y es que cada vez que tengo la oportunidad de recorrer el cauce de la quebrada Lagunilla y bañarme en sus aguas, su situación me parece más angustiante. Sumado a esto, las noticias que me llegan a través de mi madre sobre los problemas con el agua cada vez que apremia el verano: que hoy estamos sin agua, que el paso (de la quebrada sobre la vía al Pital) está seco, que hay muchas mangueras captando agua y por eso no llega, etc, etc, etc. Y esta realidad no la vive solo la vereda Lagunilla, si no otras muchas zonas rurales del municipio… y no sé hasta dónde, el casco urbano también.
El Cambio Climático, un concepto que aún a muchos parece lejano, es una realidad diaria. Una angustia diaria que se agudiza en una preocupante falta de conciencia del problema mismo. Yo siempre culpo a la falta de educación, pero también me convenzo cada día de que es la falta del más mínimo sentido común. He visto cómo talan y queman a las orillas de las quebradas para sembrar cultivos y llenarlos de venenos que van a parar al reducido cauce. También para que crezca el pasto como si las vacas no tomaran también agua.
Me entero de la cantidad de cesiones de agua que otorga la CAM, en lo que sospecho, una irresponsable práctica que no tiene en cuenta la capacidad de carga del afluente. ¿Conocerá la Corporación Autónoma del Magdalena el cauce de las quebradas sobre las que otorga tales permisos y cuántos es ambientalmente sostenible entregar? Lo dudo.
La institucionalidad es importante, pero no nos digamos mentiras: los gobiernos no van a solucionar nuestros problemas (menos un gobierno nacional que promueve la destrucción de los páramos y aguas subterráneas para extraer oro y petróleo). Necesitamos ser conscientes. No depredar, no tumbar los árboles y ese maravilloso monte que conserva nuestra agua. Es urgente sembrar árboles… cucurucho, caucho, guadua, siete cueros… Si no lo hacemos, las piedras solo servirán para decir “por aquí pasaba la quebrada…”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Déjenos su comentario sobre este artículo: